SITIO DE PODER: ERMITA DEL ROMERAL EN ARCOS DE LA FRONTERA

Un sitio de poder es un lugar donde la energía fluye de una manera mágica, especial, las personas que pueden ver la energía en estos emplazamientos la describen como un remolino ascendente, también se ha llamado vórtice energético. Generalmente estos puntos están ubicados en zonas particulares, algunos están en donde la naturaleza se mantiene en estado puro, virgen, otros en los que antiguamente se celebraron rituales o ceremonias sagradas, otros son áreas misteriosas y míticas que muestran un lenguaje ancestral oculto, que ahora está comenzado a salir a la luz y a conocerse.
Líneas Hartmann y la Vena del Dragón, determinan que sea clasificado como un lugar especial o de “Poder”.

Es sin duda alguna, uno de sectores más desconocidos del entorno, a pesar que la gente mayor recuerda haber ido de pequeños a aquel paraje cercano. Su ubicación  es de difícil visualización entre el pinar.
La primitiva ermita estaba al borde del arroyo, junto a la cueva donde fue hallado el Crucifijo, pero advertido el piadoso caballero D. Andrés Cabrera Mármol de que las aguas que bajaban por el arroyo destruían los cimientos de la pequeña ermita, apresuró hacer donación de un pedazo de tierra, en cuyo paraje se construyó, en 1765, el actual santuario, que está próximo al sitio de la aparición y distante kilómetro y medio de Arcos. Un año después, es decir, en 1766, Sor María Belén de San Andrés Cabrera Mármol, religiosa del convento de la Encarnación de esta ciudad, costeó, en unión de sus hermanos, la urna o relicario que guarda la venerada imagen, según consta por una inscripción que rodea el interior de la puerta del relicario.